Síntomas de la esclerosis múltiple en jóvenes
La esclerosis múltiple se conoce también como la enfermedad de las mil caras porque la cantidad y la intensidad de los síntomas que puede tener una persona con esclerosis múltiple pueden ser completamente distintos a los de otra, aunque tengan la misma enfermedad.
Estos son los síntomas más frecuentes que se han observado en menores de 35 años: fatiga, problemas de visión, problemas de equilibrio, dolor, espasticidad e insomnio.
¿Cómo reconocer un brote de EM?
Los síntomas de la esclerosis múltiple son un reflejo de la inflamación y el daño que se producen en el cerebro y la médula espinal por el ataque de células del propio sistema inmunitario. Por tanto, cuando la inflamación desaparece se produce la mejoría o desaparición de los síntomas.
Los brotes o recaídas son la aparición o el empeoramiento de uno o más síntomas que duran más de un día e incluso semanas. La duración de los síntomas permite distinguir si se trata de un brote o de un pseudobrote .
Estas son las claves para reconocer un brote de EM:
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Los síntomas aparecen a lo largo de horas e incluso días.
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Puede haber síntomas nuevos o empeorar los que ya estaban.
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La duración de los síntomas es mayor de 24 horas (semanas e incluso meses).
La esclerosis múltiple en jóvenes
Existen varias formas de esclerosis múltiple, aunque en jóvenes la más habitual es la esclerosis múltiple remitente-recurrente. Se llama así porque, en el tiempo, se alternan momentos de empeoramiento o brote, porque hay nuevos síntomas o empeoran los que ya había, con periodos de mejora o desaparición de los síntomas.
En los jóvenes con EM los brotes son más frecuentes y, en general, se recuperan mejor y más rápido que los adultos. La esclerosis múltiple es una enfermedad crónica para la que no hay cura, pero sí tratamientos que ayudan a vivir mejor, como pasa con la diabetes.
¿Cómo detectar la esclerosis múltiple juvenil?
Para diagnosticar la EM son necesarias diferentes pruebas médicas que demuestren que ha habido dos o más brotes en varias localizaciones del sistema nervioso central y en diferentes momentos. Es decir, si solo ha habido síntomas una vez no se puede confirmar que sea EM.
¿Cómo afecta la esclerosis múltiple a los jóvenes?
Aunque muchas personas con EM que tras el diagnóstico pueden seguir haciendo vida normal, hay síntomas que pueden reducir su calidad de vida y afectar a sus planes de futuro. Por ejemplo, la fatiga y la falta de concentración pueden hacer que estudiar sea un reto.
Por todo lo anterior, es importante identificar las necesidades de los jóvenes con EM para que reciban el tratamiento, el apoyo emocional y las herramientas que les ayuden a llevar una vida lo más normal posible y a mantener su independencia.
Un brote es la aparición o el empeoramiento de uno o más síntomas, como fatiga, problemas de visión o rigidez muscular (espasticidad) entre otros, que dura más de 24 horas, y es más frecuente en la esclerosis múltiple juvenil que en la adulta. Tras un tiempo, que puede durar varias semanas o meses, el brote remite notando una mejora o incluso la desaparición de los síntomas. Aunque la mayoría de los jóvenes con EM pueden hacer una vida normal, es importante identificar sus necesidades para proporcionarles el apoyo y los recursos necesarios para que así sea.
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