La fatiga es tan solo uno de los inconvenientes con los que tienen que lidiar los pacientes y se define como una sensación de agotamiento, de estar agotado. La fatiga puede ser consecuencia de causas explicables, como, por ejemplo, los efectos secundarios de la medicación o el esfuerzo extra que es necesario hacer para realizar tareas cotidianas que antes resultaban sencillas. Sin embargo, también puede ser consecuencia de ningún motivo aparente, y aparecer después de una noche en la hemos dormido largo y tendido.
A pesar de definirse mediante un nombre general, en la EM se distinguen dos tipos de fatiga: la fatiga primaria y la fatiga secundaria. La fatiga primaria está causada por daños en el sistema nervioso central como, por ejemplo, la desmielinización. La fatiga secundaria puede estar causada por otros síntomas de la EM o ser un efecto secundario de los tratamientos de la EM.
